El obispo de Alcalá de Henares, Juan Antonio Reig Plá, ofició el domingo 29 de noviembre una misa para honrar los "mártires" de la persecución religiosa en España, y lo hizo ni más ni menos que junto a una maravillosa bandera española con su águila incluida. Días después, el obispo, a través de un comunicado, pidió disculpas, o más bien aclaró que él no se siente identificado con ninguna posición política, lamentando con gran dolor cualquier "manipulación" que se hubiera dado al respecto. No sé qué entenderá por manipulación, ya que le avisaron que la bandera que tenía a su lado era franquista y evidentemente no le molestó, e igualmente realizó su labor.
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