viernes, 27 de mayo de 2016

Aforados

Qué prisas por aforar al viejo rey, qué celeridad por “inventarse” un procedimiento para hacerlo en menos de dos semanas. Obviamente uno se pregunta el porqué (o porqués) de tanta rapidez, de tan poco debate sobre el tema, de esa necesidad imperiosa para proteger al abdicado Juan Carlos y a la vieja reina, así como a otros miembros de la familia. Curioso lo de Sofía, ya que cuando era reina no tenía ningún tipo de protección de ese estilo, solo el rey era “inviolable”.

En fin que, como dijo el mismo Juan Carlos en uno de sus últimos discursos navideños, todos somos iguales ante la ley. Solo que se le olvidó añadir: salvo unos 10000.

25 de junio de 2014

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